lunes, 31 de agosto de 2009

dIAbEtEs 1

¿Qué es la diabetes?

La diabetes es una enfermedad que afecta el modo en que el cuerpo humano utiliza la glucosa, la forma principal de azúcar en sangre. La glucosa proviene de los alimentos que consumimos y es la mayor fuente de energía necesaria para estimular las funciones del cuerpo humano.

Después de consumir una comida, su organismo desmenuza los alimentos y los transforma en glucosa y otros nutrientes que son absorbidos en el flujo sanguíneo desde el tracto gastrointestinal. El nivel de glucosa en la sangre sube después de una comida y pone en funcionamiento al páncreas que genera la hormona insulina y la libera en el flujo sanguíneo. Pero en las personas con diabetes, el cuerpo está impedido de producir o reaccionar a la insulina adecuadamente.

La insulina trabaja como una llave que abre las puertas de las células y permite el ingreso de la glucosa. Sin la insulina, la glucosa no puede llegar hasta las células (las puertas permanecen "cerradas" y no hay una llave) de manera que se queda en el flujo sanguíneo. Como resultado, el nivel de azúcar en la sangre alcanza niveles más altos de lo normal. Los niveles elevados de azúcar representan un problema porque pueden provocar varios problemas de salud.

¿Qué es la diabetes tipo 1?

Existen dos tipos principales de diabetes: tipo 1 y tipo 2. Ambos, el tipo 1 y el tipo 2 de diabetes hacen que los niveles de azúcar sean más elevados que lo normal. Sin embargo, ambos pueden provocar ese efecto de distintas maneras.

La diabetes de Tipo 1 (antiguamente denominada diabetes insulino-dependiente o diabetes juvenil) se manifiesta cuando el páncreas pierde su capacidad de producir la hormona insulina. Con la diabetes tipo 1 el mismo sistema inmune de la persona ataca y destruye las células del páncreas que producen insulina. Una vez que esas células son destruidas, nunca más volverán a producir insulina.

Aunque nadie conoce con certeza las causas, los científicos piensan que tiene algo que ver con los genes. Pero generalmente tener los genes no es razón suficiente para tener diabetes. Probablemente una persona ha de tener que estar expuesta a algo más -a un virus, por ejemplo- para tener diabetes tipo 1.

La diabetes tipo 1 no puede ser prevenida y no existe una manera práctica de predecir quien la adquirirá. No hay nada que el progenitor o el niño hubieran hecho para provocar la enfermedad. Una vez que una persona contrae diabetes tipo 1, la enfermedad no desaparece y requiere tratamiento de por vida. Los niños y adolescentes con diabetes tipo 1 dependen de inyecciones de insulina diarias o de una bomba de insulina para controlar los niveles de glucosa en la sangre.

La diabetes tipo 2 (antiguamente denominada diabetes no dependiente de insulina o diabetes del adulto) es distinta de la diabetes tipo 1. La diabetes tipo 2 resulta de la incapacidad del organismo de responder normalmente a la insulina. A diferencia de las personas con diabetes tipo 1, la mayoría de los enfermos con diabetes 2 pueden seguir produciendo insulina, pero no lo suficiente como para satisfacer las necesidades del organismo.

¿Cuales son los signos y los síntomas de la diabetes tipo 1?

Una persona puede tener diabetes y no darse cuenta porque los síntomas no siempre son obvios y pueden tardar mucho tiempo en manifestarse. La diabetes tipo 1 puede aparecer de manera gradual o repentina.

Los padres de un niño con síntomas típicos de diabetes tipo 1 probablemente notarán que:

  • orina con frecuencia. Los riñones responden a niveles altos de glucosa en el flujo sanguíneo desechando la glucosa sobrante en la orina. Un niño con diabetes necesita orinar con más frecuencia y en volúmenes mayores;
  • se siente inusualmente sediento. Debido a que pierde mucho líquido al orinar demasiado, el niño siente mucha sed porque necesita evitar el deshidratarse. Un niño que adquirió diabetes consume mucho líquido en su afán por mantener un nivel normal de agua en el organismo;
  • pierde peso (o no aumenta de peso mientras crece) pese a que tiene buen apetito. Los niños y los adolescentes que desarrollan diabetes tipo 1 probablemente tendrán más apetito, pero a menudo pierden peso. Eso se debe a que el cuerpo humano agota los músculos y las grasas acumuladas en un esfuerzo por proveer la energía que necesitan las células extenuadas;
  • a menudo se siente cansado porque el cuerpo no pueden convertir la glucosa en energía adecuadamente.

Pero en algunos casos, otros síntomas pueden ser la señal de que algo anda mal. A veces el primer signo de la diabetes es mojar la cama cuando el niño ha estado usualmente seco durante la noche. También se puede sospechar de diabetes si una infección fungica vaginal (también denominada infección por Cándida) aparece en una niña prepuberal.

Si estos síntomas tempranos de diabetes no son reconocidos y no se empieza un tratamiento, unos elementos químicos denominados acetonas pueden desarrollarse en la sangre del niño y producir dolores de estómago, nauseas, vómitos, mal aliento, problemas de respiración e incluso pérdida de conciencia. A veces esos síntomas son confundidos con los signos de la gripe o la apendicitis. Los médicos denominan esta condición seria cetoacidosis diabética, o DKA por sus siglas en inglés.

Además de los problemas a corto plazo como los mencionados arriba, la diabetes puede causar complicaciones a largo plazo en algunas personas, incluso enfermedades del corazón, apoplejía, trastornos visuales y afecciones en el riñón. La diabetes también puede provocar otros problemas en otras partes del organismo, en los vasos sanguíneos, los nervios y las encías. Estos problemas generalmente no se manifiestan en niños con diabetes tipo 1 que tienen la enfermedad solo por algunos años. No obstante, éstos pueden mostrarse en la edad adulta en algunas personas con diabetes, particularmente si no han manejado o controlado su diabetes adecuadamente.

Hay buenas noticias, sin embargo: un tratamiento adecuado puede detener o controlar esos síntomas de diabetes y reducir el riesgo de problemas a largo plazo. Los médicos pueden determinar con certeza si una persona tiene diabetes a través de exámenes de glucosa en muestras de sangre. Si usted piensa que su hijo tiene síntomas de diabetes, hable con su médico. Si se sospecha o confirma el diagnóstico de diabetes, el medico probablemente enviará a su niño a un endocrinólogo pediatra , un médico especializado en el diagnóstico y tratamiento de niños con enfermedades en el sistema endocrino, como la diabetes y los problemas de crecimiento.


1 comentario:

  1. Me da la impresión que la información la copiaste de una página y eso carece de investigación, -.necesito que profundices en la parte del tratamiento y que tus fuentes sean más variadas y más científicas (libros de medicina interna, endocrinología,nutrición ,patología, etc)
    Es importante las estadísticas correspondientes a México que deberás actualizar mes con mes hasta el fin del curso del ciclo escolar, recuerda que esto lleva una calificación y te hace falta explicar metabólicamente la enfermedad, así como abordarla a un nivel químico y fisiológico,; lo clínico creo que está bien explicado en éste artículo. Es vital que contemples una visita al hospital de endocrinología y epidemiología para sacar datos y obtener información acerca de la enfermedad y las alternativas terapeúticas que existen en la actualidad en México. Tienen como fecha límite para realizar este trabajo el día del examen bimestral.

    ResponderEliminar